RIOJA BAJA. El sábado se celebró la XII Marcha Vía Verde de Préjano a Calahorra unos 800 participantes.

830 personas se inscribieron en la XII Marcha Vía Verde del Cidacos: Calahorra-Préjano
Por duodécimo año consecutivo, los Ayuntamientos de Calahorra, Arnedo, Autol, Herce, Quel, Santa Eulalia, Arnedillo y Préjano y el Gobierno de La Rioja en colaboración con Eroski, Cruz Roja, el Club Calagurris atlético y el trujal de Santa Eulalia de Yuso organizan la XII Marcha Vía Verde del Cidacos.

La marcha se celebró el sábado, 18 de mayo, con un recorrido de 34,5 kilómetros y el siguiente itinerario: Préjano, Santa Eulalia, Herce, Arnedo, Quel, Autol y Calahorra.

Se inscribieron un total de 830 personas, de las cuales 350 lo hicieron en Calahorra, unas 200 de Arnedo, 147 en Autol, 47 en Quel, 35 en Préjano, 31 en Herce, 30 en Arnedillo, y 15 en Santa Eulalia.

El concejal de Deporte, Félix Ángel Díez, junto con los alcaldes de Préjano, Arnedo, Autol, Arnedillo, y Herce fueron los encargados de dar la salida a la Marcha desde el mirador del Préjano. Además, también participarán en este paseo por el Valle del Cidacos la concejala de Juventud, Rosa Ortega, y la concejala de Agricultura, Mª Teresa Antoñanzas y otros concejales de las diferentes localidades de la marcha.

Al estar el día con ganas de lluvia hizo que mucha gente de los inscritos no participaría en la marcha y otros lo hicieron provistos de ropa adecuada para la lluvia, así como paraguas en mano, para por si acaso. No tuvieron que usarlos ya que el día se mantuvo sin agua, y los caminantes agradecieron la estabilidad del cielo y la temperatura que aunque fresca, serviría para que no se pasara calor en la misma.

La organización puso a disposición de todos los participantes un servicio de autobús para trasladarlos desde sus municipios hasta Préjano y, una vez finalizado el paseo, desde Calahorra hasta sus localidades.

Además, cada media hora se ofrecería avituallamiento a todos los senderistas, que también pudieron saborear y degustar en diversas partes del recorrido, en Préjano el exquisito te de roca con galletas, en el truja de Santa Eulalia de Yuso, las buenas “pringadas”, en Arnedo unas ricas magdalenas de almendra, pero mas de uno dijo si la crisis había quitado el bocadillo de embutidos, este se sustituía por sabrosas tortitas de maíz y unos bocaditos, en Autol los sabrosos champiñones con vino. También aparte de estas viandas se ofrecía agua, frutas y frutos secos.

Asimismo, a lo largo de todo el recorrido, los participantes disponían de un servicio de asistencia sanitaria de Cruz Roja y de un coche de apoyo para aquellas personas que lo necesitaran.